Aprender a propagar tus plantas suculentas es una manera simple y rentable de hacer crecer su colección sin gastar un montón de dinero. En este artículo te explicamos cómo propagar suculentas mediante los 4 tipos de propagación esenciales.
Explicado de forma sencilla, la propagación es el acto de tomar una parte o trozo de una planta suculenta adulta y usar ese trozo para hacer crecer una nueva planta.
Los cuatro métodos básicos de propagación de suculentas son: utilizando los hijuelos que crecen en la base de algunas especies, a través de esquejes de hojas (o de hojas enteras), cortando trozos de tallos o ramas de la planta, o propagar la planta a través de las semillas de una planta adulta.
La propagación de suculentas es un proceso relativamente simple, sin embargo, algunas plantas son más difíciles de propagar que otras. ¡Echa un vistazo a las 4 formas básicas de propagación de suculentas a continuación para decidir qué método te gustaría probar!
La propagación a partir de hojas enteras o de esques de hojas consiste en arrancar o cortar (depende de la variedad de planta) una hoja activa y sana de una planta suculenta madura y usarla para cultivar una nueva planta.
Este método de propagación funciona bien con suculentas que tienen hojas gruesas y carnosas como la Echeveria porque las hojas son fáciles de arrancar limpiamente.
Algunas hojas se desprenderán con un suave tirón o retorciéndolas ligeramente, mientras que otras pueden requerir de un cuchillo afilado.
Este es el proceso:
Sabrás que ha llegado la hora de trasplantarla porque la hoja «madre» se volverá marrón y se caerá. Esto significa que la suculenta ha tomado todos los nutrientes de la hoja y ya no la necesita.
La propagación de suculentas por «hijuelos» es una excelente manera de propagar suculentas porque la planta madre ya ha hecho la mayor parte del trabajo por ti.
Las «hijuelos» o «retoños», son las plantitas que brotan alrededor de la base de la planta madre. Estas crías se producen cuando las raíces de la planta madre que llevan yemas de hojas, salen a la superficie y se convierten en una nueva suculenta.
Los hijuelos también pueden aparecer en las hojas de algunas suculentas, como la Kalanchoe «Mariposa rosa».
Para separar los hijuelos de la base de la planta madre, retira la parte superior del suelo hasta que las raíces estén visibles y arráncalas con cuidado intentando conservar la mayor cantidad posible de raíces.
Los hijuelos más maduros ya habrán desarrollado sus propias de raíces, pero si aún estuviesen conectadas a la planta madre mediante un tallo, usa un cuchillo limpio y afilado para cortarlas.
Elimina la tierra vieja de las raíces de los hijuelos y deja que se sequen durante un par de días en un lugar cálido con luz indirecta para evitar que se pudran o enfermen.
Cuando hayan pasado unos días, prepara una maceta o contenedor con tierra para cactus y suculentas (te llevará a Amazon), riega la tierra, coloca la suculenta en un agujero poco profundo y rellena el agujero para estabilizar la planta.
¡Dentro de unas semanas, comenzarán a formar raíces y tendrás una nueva planta suculenta!
La propagación por esquejes de tallo funciona mejor con plantas que tienen «ramas» o suculentas en forma de roseta a las que les haya salido un tallo largo.
Este proceso es más exitoso si se realiza cuando la suculenta está a punto de comenzar su período de crecimiento activo, ya sea al final de un período latente (generalmente meses de invierno), o al comienzo de un período de crecimiento (generalmente meses de primavera) para dar a la suculenta La mejor oportunidad para sobrevivir.
Para hacer un corte adecuado de una suculenta con ramas, necesitarás un cuchillo o unas tijeras afiladas.
Elige un tallo que sea relativamente corto para asegurarte de que esté activo y en crecimiento. Sujeta el tallo lo más cerca posible de la base, y usa el cuchillo o tijeras para hacer un corte limpio.
Si el esqueje se daña durante el proceso, es probable que necesites un nuevo corte. La rama necesitará curarse durante aproximadamente cuatro días antes de poder replantarla.
A diferencia de la reproducción por hojas, el esqueje debe ser colocado directamente en una maceta con sustrato para cactus y suculentas. No es necesario enterrarlo profundamente, simplemente haz un agujero y coloca el tallo en el interior.
Riega el esqueje ligeramente una vez a la semana (solo lo suficiente para mojar la superficie de la tierra), durante 3 a 5 semanas. Debe recibir mucha luz indirecta.
Las suculentas en forma de roseta también pueden propagarse con esquejes de tallo cuando comienzan a crecer un tallo largo. Esto se suele producir cuando son plantas viejas o cuando reciben poca luz y se estiran en su busca.
La propagación de suculentas con semillas suele ser la forma más lenta de cultivar nuevas plantas, pero si tiene tiempo y paciencia, puedes intentarlo.
Las semillas de las plantas maduras se ubican en la base hinchada de la flor o «fruta», y se pueden recolectar cuando la suculenta ha terminado su floración.
En algunos casos, la semilla será un polvo de color naranja que puede ser un poco difícil de propagar. Tanto si recolectas semillas de una planta madura o si las compras, siempre usa semillas «jóvenes» y secas al comienzo de la primavera para darles un largo período de crecimiento antes del invierno.
Primero, debes preparar una maceta con mezcla de tierra para cactus y suculentas y regarla abundantemente.
En segundo lugar debes remojar las semillas en agua tibia durante unos 30 minutos para hidratarlas y ablandar la cáscara de las semillas.
Una vez remojadas y ablandadas, esparce las semillas sobre el suelo, dejando espacios entre ellas para permitir el crecimiento. Cubra las semillas con un poco de arena fina o con la mezcla para cactus tamizada sin llegar a enterrarlas demasiado.
Utiliza una botella con pulverizador para regar las semillas diariamente rociándolas ligeramente, dejando que la superficie superior se seque entre riegos.
Mantén el recipiente que has usado como plantero en un ambiente cálido, entre 25 y 30 ºC. Puedes cubrir el recipiente con plástico transparente para crear un efecto invernadero, lo que mantendrá las semillas húmedas y calientes.
Las semillas comenzarán a germinar en aproximadamente dos semanas, y después de aproximadamente seis semanas, deberías poder regar cada dos días.
Ahora ya conoces cómo propagar suculentas mediante los cuatro métodos básicos, ¡solo te queda ponerlos en práctica!
Si vas a hacerlo debes ser paciente, especialmente si te estás iniciando en la jardinería o en el cultivo de plantas suculentas, ya que siempre cuesta un poco al principio conseguir que las cosas salgan como uno quiere. Cuanto más practiques, más probabilidades tendrás de éxito. ¡Ánimo!
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