¿Eres un nuevo aficionado a las suculentas? ¿Estás comenzando en su cultivo pero no estás seguro de cómo cuidar suculentas de forma correcta?
No te preocupes, estos son los principios básicos que debes seguir para cuidar tus plantas suculentas y tener éxito en su cultivo.
#1. Aprende a regarlas de forma adecuada
Quizás has escuchado cientos de veces que las suculentas son plantas extremadamente duras y resistentes. Sin embargo, hay algunos problemas habituales que pueden arruinar tus posibilidades de criar suculentas sanas y felices, comenzando con el riego excesivo.
- Las suculentas son plantas del desierto y de zonas áridas, por lo que cuando se trata de agua, ¡menos es más!
- El truco para regar las suculentas es empaparlas bien, pero con poca frecuencia.
- Echa agua alrededor de la base de la suculenta, hasta que empiece a salir agua por los orificios de drenaje.
- Luego, deja que el suelo se seque COMPLETAMENTE. Puedes comprobarlo metiendo el dedo unos dos o tres centímetros en la tierra. Si todavía está húmeda, espera. Si está seca, puedes volver a regar.
- En el verano probablemente deberás regar tus suculentas cada 7-10 días; en el invierno con mucha menos frecuencia, una o dos veces al mes.
- Puedes leer nuestro artículo sobre Cómo regar suculentas de forma correcta para más información.
#2. Asegúrate de que reciben suficiente luz solar
- Como regla general, asegúrate de que tus suculentas reciban al menos 6 horas de luz solar indirecta al día.
- En el caso de plantas suculentas jóvenes, recién trasplantadas o propagadas mediante esquejes, la luz solar directa y prolongada puede causar quemaduras, que son irreversibles. A medida que maduran, puede ir acostumbrándolas poco a poco a períodos más largos de luz solar directa.
- Un alféizar de una ventana con exposición al sur o al oeste es un excelente lugar para colocarlas.
- Si tu casa u oficina no recibe mucho sol, o si vives en un lugar con inviernos oscuros y nublados, la suplementación con una luz de crecimiento puede ser justo lo que su planta necesita.
#3. Trasplántalas cuando sea necesario
Dependiendo de dónde compres tus suculentas, pueden venir en macetas demasiado pequeñas para su tamaño o incluso venir sin maceta. Si compras una planta de un supermercado o en una gran tienda de decoración o jardinería, por ejemplo, las plantas suelen venir en pequeñas macetas de plástico. Las macetas de plástico no son intrínsecamente malas, pero es más fácil mantener a las suculentas saludables en macetas de terracota.
Otra cosa a tener en cuenta es que si no las compras directamente en un vivero especializado en suculentas y cactus, la mezcla de suelo probablemente no sea ideal para plantas suculentas. Es probable que sea tierra para macetas regular. Debes reemplazar esa tierra con una mezcla especial de cactus y suculentas tan pronto como sea posible.
Puedes leer nuestro artículo Cómo trasplantar suculentas y cactus para una explicación detallada, pero estos son los pasos a seguir para trasplantar tu suculenta explicados de forma muy resumida:
- Elige una maceta o recipiente que sea lo suficientemente grande como para que puedas meter dentro la planta suculenta con su maceta original, así estarás segura de que es lo suficientemente grande. A mi me gusta usar macetas de terracota porque son asequibles y casi siempre tienen un orificio de drenaje, ¡pero puedes usar casi cualquier cosa como maceta! Una taza, latas, tarros, cajas de madera, latas de té o de galletas viejas … ¡lo que sea que te guste y que le de un toque original! (Si la maceta de tus sueños no tiene un orificio de drenaje, agrega una capa de rocas al fondo antes de plantar tu suculenta).
- Saca la planta con cuidado de su maceta original desprendiendo caso por completa la tierra con la que venía.
- Coloca la planta en su nuevo recipiente con un sustrato seco y con buen drenaje.
- Deja la planta reposar durante dos o tres días en su nuevo recipiente antes de regarla por primera vez.
#4. Añade fertilizante de vez en cuando
¡Un poco de fertilizante (*) puede ayudar mucho a que tus suculentas crezcan y se mantengan libres de enfermedades!
- Durante el trasplante es el momento ideal para añadir al sustrato un poco de fertilizante. Un fertilizante orgánico granulado de liberación lenta como este que puedes encontrar en Amazon o cualquier otro similar son la mejor opción.
- Si todavía no necesitas replantar tus suculentas, espera hasta que sea el momento de regarlas para agregar un poco de fertilizante líquido a tu regadera. Este fertilizante con aminoácidos para cactus y suculentas de Battle Huerto y Jardín es perfecto y también funciona bien para defenderse de los hongos.
(*) Puedes usar un fertilizante no específico para cactus y suculentas, pero en ese caso, asegúrate de usar solo el 25-50% de la dosis recomendada.
Solo necesitas fertilizar un par de veces al año, y es un proceso bastante simple.
#5. Aprende cómo reproducirlas (o propagarlas)
Propagar es el proceso reproducir o de crear nuevas plantas usando hojas, esquejes o retoños de una planta madre. ¡Una vez que tengas una suculenta, puedes construir un ejército entero!
Para obtener instrucciones paso a paso sobre cómo propagar tus suculentas, puedes leer estos artículos: Cómo propagar suculentas: los 4 métodos básicos o Cómo reproducir suculentas a partir de hojas y esquejes: paso a paso.
#6. Protege tus suculentas en invierno
- Si vives en un lugar que alcance de forma continuada temperaturas bajo cero, entonces debes meterlas dentro de casa en invierno. Si tienes plantadas tus suculentas fuera y no hay forma de desenterrarlas, usar una malla antiheladas como esta para cubrirlas también es una opción.
- En invierno debes reducir la frecuencia de riego. Muchas suculentas permanecen inactivas en invierno y no tienen necesidad de tanta agua. Regar una o dos veces al mes debería ser suficiente para la mayoría de las suculentas (con excepciones). ¡Asegúrate de que tengan un buen drenaje y vigila la humedad del suelo!
- Recuerda la regla de las 6 horas diarias de luz y colócalas en una ventana con buena exposición solar.
- Si notas cambios en tus suculentas: hojas que se caen, rosetas que se cierran, los colores palidecen, ¡no te asustes!, tus suculentas volverán a resplandecer una vez llegue la primavera.
Para más información lee nuestro artículo Cómo cuidar Susulentas en invierno.